¿Te atreverías a desafiar al Estado o acallarías los derechos civiles?
Antígona y su hermana Ismene lloran mares por las pérdidas de sus hermanos Eteocles y Polinices, víctimas de la batalla contra el otro por el trono de Tebas. Y de forma para que divague el espíritu al menos de Polinices por la tierra, Creonte, el nuevo rey de Tebas (tío de Antígona), ordenará no sepultar a su dicho hermano. Ella en desacuerdo con lo mandado, decide anteponer el deber familiar al deber del Estado y sin importarle esto, sepultará a su hermano de todas maneras.Sin embargo pudo no ser gran idea ya que cuando llegó a oídos del rey éste ordenó encontrar al culpable por desafiar las leyes estatales. Más tarde, ya capturarla, intenta enterrarle de nuevo, confesando el dicho delito y además tratando de salvar a su hermana también pues acusada de cómplice había sido.
Hemón, hijo del rey y prometido de Antígona, intenta conseguir el perdón de su padre. Sin embargo, esto hace enfadarle más y decide enterrar viva a la mujer. Aunque al aparecer Tiresias, el vidente del pueblo, le advierte que debe liberar a Antígona y sí sepultar a Polinices. Por otro lado, esto acaba sin buen resultado alguna ya que poco después de quedar libre la mujer se comunica su muerte, cuyo cuerpo colgaba del velo de su boda. Hegón no aguante terrible sufrimiento y decide quitarse la vida también, cargando el rey su cuerpo hasta palacio, encontrando a su esposa sin vida también y se culpa a sí mismo por todos los hechos.Antígona es una tragedia escrita por Sófocles hace más de 2000 años en la antigua Grecia, llegando a su primera representación teatral allá por el año 441 a.c. Hasta día de hoy, sigue siendo representada y considerada una de las obras más revelantes del autor y de la dramaturgia universal.
Como habréis leído, la trama gira entorno a la protagonista, la cual desafía la ley para rendir la muerte de su querido hermano Polinices, aún considerado traidor de la patria. Haciendo el tema principal de la tragedia el antagonismo entre el orden cívico y el divino, incluyendo la libertad, los derechos del individuo ante el Estado y el papel de la mujer en aquella sociedad.Concluiría que el conflicto entre Creonte y Antígona es el más importante de la obra, ya ella defendiendo dichas leyes que, aunque no escritas, se mantienen presentes en aquellos tiempos remotos. Básicamente, para ella, honrar a los dioses debe estar por encima de todo, sin embargo, elegir la ley del Estado es seguir los deseos de la humanidad y no los tuyos propios.