29 abr 2023

La Suma Sacerdotisa - Enheduanna

 “Eres Inanna

suprema en el cielo y la Tierra”


Enheduanna, una princesa que vivía en Ur, el actual Irak, es una de las primeras mujeres en la historia cuyo nombre se conserva. Esta poeta y escritora acadia, ostentó además el cargo político y religioso de Suma Sacerdotisa en el templo del dios Nannar, el que representaba la luna. Su nombre, que realmente no era un nombre sino un título, puede tener diversas interpretaciones. Fue designada por su padre y continuó con el cargo en el reinado de su hermano, durante el cual la expulsaron al implicarse en alguna forma de agitación política. Sin embargo, posteriormente fue restituida como suma sacerdotisa. Tras su fallecimiento, siguió siendo recordada como una figura importante, incluso obteniendo un estatus semidivino. Además se hicieron muchas copias de sus obras, situadas junto a las inscripciones reales, lo cual indicaba que poseían alto valor. Entre sus 42 himnos escritos, de temas religiosos, se encuentra el “Himno a Inanna” o “Exaltación de Inanna”, en el que aparte de describir a la diosa y contar su devoción hacia ella, añade detalles sobre su expulsión de Ur.

Inanna, la diosa a la que se le dedica este canto,  era la diosa sumeria del amor, la belleza, el sexo, la guerra, la justicia y el poder político, además de protectora de la ciudad de Uruk. Más tarde se la conoció por el nombre de “Ishtar”. Asociada con el planeta Venus, era conocida como “Reina del Cielo”, algo a lo que en el poema se hace referencia. “Himno a Inanna”, es un poema religioso que establece una conexión entre lo teológico y la lírica. Además de ser muy muy antiguo, originalmente estaba escrito en una tablilla y en escritura cuneiforme, en babilónico asirio. Se cree además que esta diosa pudo influir en el desarrollo de la diosa Afrodita. Su culto permaneció hasta su declive entre los siglos I y VI, a raíz del nacimiento del cristianismo.